Workstation musical

Características de las workstations musicales

  • Clasificación: instrumento musical electrónico
  • País de origen: Japón
  • Materiales:
  • Tesitura:
  • Género musical: todos los géneros (electrónica, pop, rock, hip-hop, etc.)
  • Músicos famosos: Jordan Rudess (nacido en 1956)
  • Canción emblemática:

Todo lo que debes saber sobre la estación de trabajo musical: sus características, su historia, su evolución, su funcionamiento, su lugar en la cultura y su compra

La estación de trabajo musical ha contribuido considerablemente a la evolución del sistema electrónico. Siendo un instrumento relativamente versátil, está dotada de funcionalidades avanzadas esenciales para la producción sonora. Su flexibilidad la convierte en una herramienta predilecta para compositores y artistas que la utilizan. Estos últimos pueden crear piezas completas totalmente personalizadas a partir de este dispositivo.

Descripción de la estación de trabajo musical 

La estación de trabajo musical, que significa “workstation” en español, es un teclado electrónico con múltiples funcionalidades. Presenta características que la diferencian de otros instrumentos similares.

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Descripción técnica del instrumento 

Este aparato es un sintetizador completo dotado de una capacidad de producción integrada. Agrupa una sección de síntesis multitímbrica, efectos y un secuenciador.

Sección de síntesis multitímbrica

Permite mantener una polifonía elevada que confiere al músico la posibilidad de producir simultáneamente diferentes tipos de sonidos. Puede tratarse de melodías de bajos, guitarras, pianos, teclados eléctricos, metales, cuerdas o incluso percusiones.

Efectos

Los efectos de la estación de trabajo permiten tratar cada canal sonoro individualmente, aportándole un toque final personalizado.

Secuenciador

El secuenciador sirve para crear piezas completas. Son posibles dos maneras de producción de sonido: lineal o en bucle. La primera consiste en grabar pistas desde el principio hasta el final. La segunda guarda patrones para luego ensamblarlos en música.

Las estaciones de trabajo han evolucionado progresivamente con el avance de la tecnología. Los modelos actuales incluyen:

  • una polifonía incrementada (128 a 256 voces);
  • una multitimbralidad que comprende hasta dieciséis canales;
  • entre dos y nueve motores de síntesis;
  • teclados de control;
  • numerosos efectos fáciles de integrar, más potentes y de mejor calidad;
  • secuenciadores evolucionados;
  • herramientas de mastering (compresor y limitador multibanda) para finalizar los temas;
  • etc.

Con todas estas funcionalidades, la estación de trabajo actúa como una verdadera navaja suiza, justificando su uso en estudio o incluso durante una sesión en vivo. Permite componer de manera creativa sonido electrónico gracias a un solo equipo.

Diferencias entre la estación de trabajo musical y los dispositivos con funcionalidades similares

La estación de trabajo musical presenta particularidades que la distinguen de otros tipos de teclados digitales.

Distinción entre estación de trabajo y sintetizador

La principal distinción entre una estación de trabajo y un sintetizador reside en su capacidad para generar sonidos de maneras variadas. Estos dispositivos son ambos teclados, pero difieren por el número de teclas, las funcionalidades, los tipos de sonido producidos y su potencia.

Los sintetizadores generalmente presentan menos de veinte botones, mientras que las estaciones de trabajo poseen a menudo sesenta y uno como mínimo. Además, estas últimas ofrecen una amplia gama de efectos integrados para manipular los sonidos y crear una melodía adaptada antes de la grabación. Son perfectas para los músicos que desean experimentar nuevas técnicas de aproximación. Las estaciones de trabajo son controladores MIDI en versión más compleja. En la mayoría de los casos, a menudo asocian un teclado y un secuenciador, con una interfaz de audio intuitiva y varias salidas para una mejor calidad de sonido durante las grabaciones.

En términos de producción, los sintetizadores evocan a menudo instrumentos tradicionales como el violín o el piano. En realidad, estos dispositivos musicales son capaces de crear una variedad de sonidos, desde pianos hasta efectos espaciales de ciencia ficción. Están diseñados para reproducir las melodías de los sintetizadores analógicos, ofreciendo una calidad sonora distinta.

En cuanto al uso, los sintetizadores son versátiles y utilizados en diversos géneros musicales. Son perfectos para actuaciones en vivo debido a su expresividad. Por otro lado, las estaciones de trabajo musicales son preferibles para la grabación en estudio, ofreciendo una alternativa digital a los voluminosos sintetizadores analógicos.

Distinción entre estación de trabajo y teclado arreglista

Una estación de trabajo musical y un teclado arreglista son similares en apariencia, tanto que a veces se confunden. Aunque estos dos instrumentos comparten elementos constitutivos similares, difieren sin embargo en su enfoque. El primero permite crear una pieza de manera metódica, mientras que el segundo está más orientado hacia la interpretación, con una potente sección de acompañamiento. Los arreglistas son más adecuados para contextos de piano-bar, y pueden ser útiles para los compositores para experimentar diferentes ambientes. Algunos teclados arreglistas pueden incluso considerarse como verdaderas estaciones de trabajo musicales, como el PA4X de la marca Korg.

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Distinción entre estación de trabajo musical y piano digital

Los pianos digitales son instrumentos de teclado electrónicos que ofrecen funcionalidades de edición y rendimiento restringidas en comparación con los sintetizadores. Además, su número de sonidos es relativamente limitado. A menudo están equipados con 88 teclas ponderadas para reproducir la acción de un piano acústico.

Las estaciones de trabajo musicales están dotadas de capacidades de grabación integradas para crear y registrar sonido a través del MIDI, la grabación de audio o ambos. Ofrecen melodías y una acción de teclado comparable, incluso superior a las de los pianos digitales. Similares a los sintetizadores en términos de funcionalidades y sonidos, sin embargo, integran opciones de grabación adicionales. Algunas estaciones de trabajo tienen un aspecto similar al de un piano digital con 88 teclas ponderadas, mientras que otras se parecen más a sintetizadores con 61 teclas no graduadas.

En este caso, los pianistas se inclinarán por un piano digital mientras que los intérpretes que deseen crear y grabar sonido con una variedad de instrumentos optarán por una estación de trabajo musical.

Historia y origen de la estación de trabajo musical

La estación de trabajo musical apareció hacia finales de los años 1970 en Japón. La aparición de microprocesadores, mini-ordenadores, síntesis digital y almacenamiento en disco permitió combinar los secuenciadores con los sintetizadores. Esta tecnología resulta a la vez asequible para estudios y productores, mientras sigue siendo portátil para los artistas.

El desarrollo de las estaciones de trabajo musicales, en efecto, revolucionó la integración entre la secuenciación y la síntesis. Antes de esto, la manipulación era principalmente manual. Implicaba el cableado de componentes en sintetizadores modulares y el almacenamiento de notas mediante ajustes de potenciómetros en secuenciadores analógicos. Sin embargo, la estación de trabajo jugó un papel crucial al automatizar e integrar los procesos de secuenciación y síntesis. Permitió centralizar estas funciones en un solo aparato, ofreciendo a los usuarios un dispositivo musical más práctico y eficaz para componer, grabar y producir sonido.

Las estaciones de trabajo, además, introdujeron interfaces amigables, funcionalidades de programación avanzadas y capacidades de almacenamiento digital importantes. Revolucionaron la manera en que la música electrónica era creada y producida.

Los sistemas como el Fairlight CMI y el NED Synclavier son considerados como estaciones de trabajo a finales de los años 1970. No obstante, el Korg M1, aparecido en 1988, es reconocido como la primera estación de trabajo de la historia. El M1 ofrece dieciséis voces de polifonía, ocho canales de multitimbralidad, un secuenciador MIDI de ocho pistas que puede almacenar hasta 12.000 notas y dos efectos simultáneos. Sin embargo, su función está limitada a la lectura de muestras, con parámetros de síntesis limitados y posibilidades de modulación restringidas.

Korg rápidamente se convirtió en la marca líder de estaciones de trabajo musicales, perfeccionando el concepto con modelos como el 01/W, el Trinity, el Triton y el M3. El Oasys, lanzado posteriormente, alcanzó su apogeo al agrupar diferentes motores de síntesis en un teclado que integraba una tarjeta PC, un disco duro y un software específico funcionando bajo Linux.

Evolución de la estación de trabajo musical

Las estaciones de trabajo musicales han conocido tres generaciones con tecnologías clave diferentes para cada una de ellas.

Estaciones de trabajo musicales de la primera generación

Los inicios de las estaciones de trabajo se remontan a los años 1970 con pioneros como el Synclavier de New England Digital y el Fairlight CMI (Computer Music Instrument).

Las tecnologías clave para la primera generación conciernen al hardware informático, la síntesis digital, el almacenamiento en disco y el control electrónico.

Hardware informático

El uso de microprocesadores permitió transferir funciones de control complejas a software, haciendo las estaciones de trabajo más accesibles. El Sequential Circuits Prophet-5 figura, por ejemplo, entre los primeros en utilizarlos para el almacenamiento y la recuperación de parámetros.

Síntesis digital

En lugar de apoyarse en módulos de síntesis analógica, las estaciones de trabajo adoptaron la síntesis digital para crear nuevos sonidos.

Almacenamiento en disco

Los disquetes fueron ampliamente utilizados para registrar parches, secuencias y muestras. Abrieron el camino al almacenamiento en disco duro en los modelos de generaciones posteriores.

Control digital

Las señales de control del teclado eran digitalizadas y dirigidas hacia el procesador del ordenador, ofreciendo una flexibilidad y una escalabilidad incrementadas.

Estaciones de trabajo musicales de la segunda generación

En los años 1980, se realizaron avances importantes con la creación de sistemas de síntesis digital como el Fairlight CMI Series II y el Synclavier. Ofrecen más listas de muestras y capacidades de muestreo en disco duro.

Las tecnologías clave para la segunda generación comprenden la introducción del MIDI (Musical Instrument Digital Interface), la visualización gráfica, la extensión de memoria y el procesamiento digital de señales

Introducción del MIDI

El uso del MIDI en 1983 permitió la transferencia de datos sonoros entre diferentes aparatos. Abrió el camino a una integración más transparente entre los equipos musicales.

Visualización gráfica

Las estaciones de trabajo adoptaron pantallas gráficas para una visualización más avanzada de los parámetros y formas de onda.

Extensión de memoria

Las estaciones de trabajo disponen de una capacidad de memoria suficiente para almacenar muestras y parámetros más complejos.

Procesamiento digital de señales

Los efectos como la reverberación pueden ser generados por la estación de trabajo, eliminando la necesidad de periféricos externos.

Estaciones de trabajo musicales de la tercera generación

Durante los años 1990, las estaciones de trabajo musicales se volvieron más compactas e integraron funcionalidades avanzadas como el muestreo, la secuenciación y la generación de código de tiempo SMPTE.

Sus tecnologías clave incluyen una memoria de alta capacidad, bibliotecas de muestras, alimentación por batería e interoperabilidad con ordenadores personales.

Alta capacidad de memoria

Las estaciones de trabajo musicales aprovechan ahora un espacio de memoria más importante en chips más compactos, ofreciendo una mayor flexibilidad de almacenamiento.

Bibliotecas de muestras

Las estaciones de trabajo a menudo vienen con bibliotecas de muestras que pueden ser ampliadas gracias a tarjetas ROM adicionales.

Alimentación por batería

Las versiones portátiles continúan ganando popularidad, ofreciendo una mayor autonomía gracias a un uso más eficiente de la energía.

Interoperabilidad con ordenadores personales

Las estaciones de trabajo musicales pueden ahora comunicarse con ordenadores personales gracias a interfaces estándar como USB. Permiten a los usuarios novatos descubrir y experimentar sus funcionalidades.

Algunos ejemplos de estaciones de trabajo musicales

La estación de trabajo musical se desarrolla en varios países del mundo.

El Kronos de la marca japonesa Korg, gracias a los avances tecnológicos, es hasta la fecha el modelo de referencia. Supera al Nautilus, un modelo reciente fabricado por la misma marca. En su lanzamiento, el M1 inmediatamente encontró un gran éxito, empujando así a la competencia a organizarse rápidamente para mantenerse en la carrera.

En Estados Unidos, Ensoniq tomó el relevo, superando a E-mu Systems que se concentró más en el diseño de muestreadores. Entre los ejemplos notables, VFX-SD, SD-1, TS y MR también se encuentran a la cabeza de la clasificación. La marca E-mu finalmente decidió integrar una memoria ROM a su Emulator-4 para ofrecer a los usuarios posibilidades ampliadas.

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En 1992, Kurzweil lanzó el K2000, un modelo que acumulaba síntesis modular virtual, efectos, secuenciador, muestreo y arpegiador. Fue mejorado continuamente. Sin embargo, la marca decide retirarse temporalmente del mercado de las estaciones de trabajo antes de volver a la primera línea.

Alesis lanzó el modelo Fusion, una estación de trabajo musical que integraba funcionalidades consideradas como innovadoras, pero que desafortunadamente no encontró el éxito esperado.

Por el lado europeo, la actividad era menos dinámica, pero es bueno mencionar los S2/S3 y el Equinox lanzados respectivamente en 1995 y 1999, dispositivos diseñados por GEM. Sin embargo, esta marca italiana ya no está presente en el mercado.

En Japón, las marcas especializadas en este campo rivalizan en ingenio para ganar y mantener una ventaja sobre la competencia. Yamaha lanzó la serie SY, seguida de la serie EX que ofrece motores sonoros variados. Estas estaciones de trabajo musicales se impusieron rápidamente en el mercado, consideradas como verdaderas referencias. Sin embargo, la marca nipona poco a poco abandonó la gama EX en favor de la serie Motif.

En Roland, la serie Fantom logró distinguirse. Tras su creciente éxito, se desarrolló en numerosas variaciones. Esta gama es apreciada por su capacidad para proporcionar una amplia gama de sonidos, desde pianos cristalinos modelados hasta sintetizadores analógicos, gracias especialmente a la arquitectura Zen-Core.

Funcionamiento de la estación de trabajo musical

La estación de trabajo musical dispone de configuraciones complejas que combinan las funcionalidades de un sintetizador con las de un secuenciador, un muestreador y a menudo un grabador multipista. Los usuarios pueden componer, arreglar y producir piezas completas, sin necesidad de equipo adicional. La estación de trabajo opera como un estudio en un solo dispositivo. Utiliza un periférico MIDI externo para crear sonido. Sin embargo, el número de preajustes para diferentes tipos de melodías es limitado.

Lugar de la estación de trabajo musical en la cultura

La estación de trabajo musical ocupa un lugar importante en la escena. A menudo es utilizada por los teclistas para reproducir sonidos sintetizados y activar muestras en software de producción. Jordan Rudess, teclista y compositor renombrado, es conocido por sus actuaciones dentro del grupo de metal progresivo americano: Dream Theater. Ha tocado diferentes estaciones de trabajo, especialmente el teclado Korg Kronos. Este artista de renombre es aclamado por su dominio técnico y su capacidad para explotar plenamente las capacidades avanzadas de las estaciones de trabajo en sus actuaciones en directo y sus grabaciones. A menudo utiliza una combinación de melodías de piano, sintetizadores, pads y otros instrumentos para crear paisajes sonoros complejos y evocadores.

Elección y compra de la estación de trabajo musical 

Los avances tecnológicos han hecho que las estaciones de trabajo musicales de calidad profesional sean más asequibles. Sin embargo, sigue siendo crucial tomarse el tiempo para comparar bien los diferentes modelos antes de hacer su elección. Así, el proceso de selección se basa generalmente en varios criterios objetivos y subjetivos, especialmente:

  • la facilidad de uso;
  • el número de pistas en el secuenciador;
  • las opciones de extensión y modularidad;
  • las normas soportadas como MIDI y SMPTE;
  • la adaptación a las exigencias de la producción musical;
  • el número de preajustes sonoros;
  • las características del teclado (número de teclas);
  • la capacidad de RAM y ROM para la memoria y el almacenamiento de las muestras de sonidos;
  • las interfaces disponibles: USB para la transferencia de datos y audio para la grabación;
  • la variedad de efectos;
  • las funcionalidades (pregrabación, polifonía, etc.);
  • los motores de síntesis;
  • el arpegiador;
  • el secuenciador;
  • etc.

La plataforma France Minéraux constituye la dirección a privilegiar para los amantes de la música en busca de materiales e instrumentos de calidad. Propone una amplia gama de estaciones de trabajo musicales que presentan rendimientos incrementados. No dude en consultar la descripción detallada que acompaña a cada modelo para descubrir sus características técnicas, sus funcionalidades y sus especificaciones con el fin de tomar una decisión informada. Además de las estaciones de trabajo, este sitio propone también otros tipos de instrumentos musicales como guitarras, pianos, percusiones, etc.

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