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El ching es un instrumento de pequeño tamaño, perteneciente a la familia de los idiófonos. Está compuesto por un par de platillos, en forma de cuenco, conectados por un cordel anudado en ambos extremos. Los percusionistas camboyanos y tailandeses lo utilizan para marcar el ritmo en las músicas tradicionales.
Cada cuenco del ching mide aproximadamente cinco centímetros de diámetro y tiene, en el centro, un pequeño agujero para pasar la correa.
La aleación de metales utilizada para su fabricación lo hace grueso y pesado. En general, los artesanos emplean una mezcla de hierro, cobre y oro.
Debido a su pequeño tamaño, cada platillo se sostiene con una mano. Se golpean uno contra otro siguiendo un patrón cíclico para regular la melodía y mantener el ritmo. Funciona como un metrónomo cuando se toca en el seno de un conjunto musical.
Se han encontrado pruebas de la existencia del ching en Angkor, un sitio arqueológico de Camboya, en los templos de la civilización jemer. Ha sido observado en representaciones de bailarines en las paredes. Este pueblo lo utilizaba en diversos ámbitos artísticos como:
El chhing también se tocaba para la danza de corte camboyana, las festividades tradicionales con máscaras, así como durante diferentes ceremonias. Acompañaba a otros dispositivos como los círculos de gongs, el xilófono, los tambores, etc.
En Tailandia, los percusionistas lo utilizan para dar el tono a los violinistas, flautistas y a los intérpretes de cítara.
A pesar de su peso, el ching es fácil de manejar y su interpretación es lúdica. Los músicos tienen la posibilidad de crear sus propias técnicas de interpretación. La improvisación es la clave para explorar todo el potencial de esta percusión.
Para producir sonido, basta con sostener en cada mano un platillo y golpearlos uno contra otro. Un sonido abierto o chhing se obtiene golpeando el de la izquierda con el de la derecha, deslizando este último hacia el exterior.
El chhepp (sonido cerrado o atenuado) se produce manteniendo los dos pequeños platillos juntos después de haberlos golpeado.
El ching también es adecuado para niños, dado que favorece el despertar y el desarrollo de la cultura musical. Además, ayuda a mejorar la coordinación, las capacidades cognitivas, la creatividad y la inteligencia emocional. Sin embargo, es esencial verificar que sean capaces de utilizarlo sin lastimarse, especialmente porque el ching es bastante pesado.
En las transcripciones, los golpes están indicados con un (o) cuando están acentuados (chhing), y con un (+) en caso contrario (chhepp).
Aunque la aleación de metales es resistente, son necesarias algunas precauciones para mantener el ching en perfecto estado. Para evitar que los platillos se vuelvan opacos y se cubran de manchas, es importante almacenarlos en un lugar seco. Se recomienda guardarlos dentro de una caja o un estuche duro.
Además, una limpieza con productos apropiados permite eliminar eficazmente la suciedad y evitar que el metal se deteriore. Entre los elementos a utilizar, los músicos pueden elegir entre:
Basta con humedecer un paño suave con una de estas soluciones y frotar delicadamente los elementos. Dejar actuar el producto durante unos quince minutos contribuye a obtener un resultado perfecto. El paso final consiste en enjuagar el instrumento con agua tibia y secarlo con un paño seco.
Las tiendas de bricolaje y los diferentes sitios de venta también ofrecen productos especiales para la limpieza de dispositivos metálicos.
Se ofrecen cursos de ching en centros y escuelas de música. Los interesados generalmente tienen la posibilidad de seguir cursos a distancia o presenciales. Cada uno puede elegir según su disponibilidad y preferencias.
En general, esta percusión es fácil de aprender. Simples ejercicios son suficientes para saber utilizarla. Sin embargo, es preferible estar acompañado por un profesional para progresar rápidamente y dominar técnicas de interpretación más avanzadas.
El aprendizaje a menudo tiene un aspecto lúdico, permitiendo familiarizarse rápidamente con el instrumento. Diferentes contenidos también están disponibles en la Web. Los videos en YouTube, además de los artículos en blogs especializados, permiten aprender los gestos y técnicas empleados por intérpretes experimentados.
Los foros también dan la posibilidad de conocer a instrumentistas experimentados. Ellos ofrecen generalmente trucos con el fin de entender mejor el funcionamiento del chhing.
La calidad del ching influye en sus sonoridades, su ergonomía y su robustez. Por lo tanto, es importante considerar algunos criterios de compra.
En general, su procedencia dice mucho sobre un instrumento musical. Los modelos fabricados en Camboya y Tailandia son los mejores. En efecto, los artesanos los conciben con materiales cuidadosamente seleccionados y según las técnicas tradicionales.
Además, conviene comparar los accesorios suministrados con el chhing. Por ejemplo, algunos modelos se entregan en fundas o estuches.
Es posible comprar el ching en línea. En su Marketplace, France Minéraux presenta una amplia selección de percusiones que responden a todas las exigencias. Principiantes y profesionales descubren modelos de calidad, auténticos y adaptados a todos los presupuestos.
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