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Antes que nada, es importante precisar que existen distintos aceites esenciales de mandarina. Aunque este fruto puede ser verde, amarillo o rojo, los tres provienen de la misma especie: el Citrus reticulata Blanco o mandarino. Estos colores representan el grado de madurez de los cítricos.
Se trata de un árbol de pequeño tamaño que pertenece a la familia de las Rutaceae. Sus hojas son persistentes y brillantes, y presentan un tono verde intenso. La presencia de espinas se nota en sus ramas. El mandarino produce pequeñas flores blancas que dan como fruto la conocida mandarina. Esta denominación vendría de los funcionarios mandarines del Imperio chino.
Este fruto tiene sus orígenes en el Lejano Oriente, en Japón, Vietnam y China. Se caracteriza por su alto contenido en vitamina C. Al inicio del otoño, las mandarinas son verdes debido a la riqueza en clorofila de su pericarpio. Al acercarse el invierno, este color desaparece progresivamente debido a las diferencias de temperatura entre el día y la noche. Este fenómeno es, por lo tanto, el principal factor de cambio de color de las mandarinas, pasando de verde a amarillo, y luego a rojo. El aceite esencial de esta planta se extrae hoy principalmente en América del Sur, España e Italia.
El aceite esencial de mandarina amarilla se caracteriza por sus propiedades calmantes, antisépticas y hepáticas. En difusión, es adecuado para todas las edades, ya que crea una atmósfera reconfortante y saludable.
El aceite extraído de la mandarina amarilla devuelve el brillo a las pieles opacas al aportarles tonicidad. Al ser también seboregulador y antiséptico, combate eficazmente el acné y ayuda a mejorar el exceso de sebo del epidermis así como del cuero cabelludo. Esta esencia también ayuda en la eliminación de la celulitis y contribuye al tratamiento de la retención de agua.
El extracto de mandarina amarilla es una alternativa ideal para encontrar la calma. Su suave aroma sutilmente ácido es particularmente adecuado para los jóvenes. Su uso está indicado para crear un ambiente propicio para la relajación y el descanso. Es capaz de reducir el estrés y ayudar en el tratamiento de trastornos del sueño. Este aceite esencial también permite la liberación de tensiones nerviosas y musculares. Posee así propiedades carminativas, sedantes, calmantes y antiespasmódicas.
Aparte de las cualidades olfativas específicas de la esencia de mandarina amarilla, las fragancias que proporciona tienen otras ventajas. Limita al máximo la proliferación de virus durante la temporada fría. Facilita la digestión debido a su acción positiva sobre el estómago y los intestinos. Hepática y tónica, contribuye al buen desarrollo del proceso de digestión y favorece la desintoxicación del hígado.
El extracto de mandarina amarilla es adecuado tanto para adultos, como para niños, bebés, mujeres embarazadas de más de tres meses y aquellas que están amamantando. Al ser dermocáustico, este aceite esencial debe diluirse en un 20 % en un aceite vegetal antes de usar. Se debe evitar aplicarlo en una superficie demasiado extensa. En personas que padecen asma y cálculos biliares, este producto está contraindicado. Se requiere la opinión médica o de un especialista en este caso.
Al igual que otros aceites esenciales, la esencia de mandarina amarilla es fotosensibilizante. Esto significa que la exposición a los rayos UV está altamente desaconsejada durante las ocho horas siguientes a su aplicación cutánea. El limoneno está presente en abundancia en el extracto de mandarina amarilla. También se encuentran trazas de geraniol, citronelol, neral, geranilo y linalol en su composición. Para evitar cualquier riesgo de alergia, lo mejor es realizar una prueba de aplicación en el pliegue del codo 24 horas antes de cualquier uso. La razón de esto es que estos compuestos se clasifican entre las moléculas llamadas alergénicas. El limoneno también puede alterar el metabolismo en el cuerpo humano si se toma a largo plazo o repetitivamente. Su acumulación en los tejidos adiposos genera una disminución del número de esteroides suprarrenales en los hombres. Se recomienda un uso de corta duración.
Los usos del aceite esencial de mandarina amarilla varían según el caso.
En caso de trastornos del aparato digestivo, se debe diluir 1 gota de AE de mandarina amarilla en 4 gotas de aceite vegetal. Utilice esta combinación como producto de masaje en la parte inferior del abdomen. El aceite vegetal se puede sustituir por un comprimido neutro o 1 c.s. de miel. Tenga en cuenta no superar el máximo de 3 tomas diarias.
Conviene preparar 1 gota de extracto de mandarina amarilla y 4 más de aceite vegetal. Se aconseja aplicar en los músculos afectados y realizar un masaje. La práctica debe repetirse hasta que el problema desaparezca, sin superar las 3 semanas.
Para aliviar picaduras o mordeduras de insectos, el aceite esencial de mandarina amarilla debe usarse en sinergia. En un frasco, se deben preparar 2,5 ml de extracto de eucalipto limón y la misma cantidad de limón, mandarina amarilla y petit grain bigarade. Con un hisopo, se debe aplicar una pequeña cantidad en la zona afectada. El gesto se debe repetir tantas veces como sea necesario.
Utilizada con el ojo de tigre, la esencia de mandarina amarilla favorece la motivación. Es importante notar que esta piedra estructura los pensamientos y la energía con el fin de aportar más coherencia entre ellos. Disminuye los estados depresivos y elimina el malestar.
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